Trabajo en la administración de Double Key Investment.

Siempre he tenido una predilección por España.

En el invierno de 1994 hice un curso de español. Solo había unos 200 metros hasta el aula, pero fue suficiente, el viento aullaba y nevaba a montones… dije en voz alta para ahogar el viento: ¡Nací en el país equivocado! Pero aquí estoy ahora, 20 años después.

Mi vida laboral ha consistido en trabajar con personas como auxiliar de enfermería, en prisiones, dependienta, etc. Me alegra conocer y ayudar a conocidos nuevos y antiguos.

En España llevo trabajando 2 años y medio. No me he arrepentido ni un segundo. Realmente amo España: el sol, el cielo azul, la gente, el mar, las playas, la comida, los árboles con aguacates, limones, naranjas o nuestras uvas calentadas por el sol que crecen en nuestro jardín y mucho más.

Puse en marcha una empresa de alquileres porque teníamos muchos clientes (a los que Anders había vendido viviendas) que querían que les ayudáramos a alquilar sus viviendas. ¡Madre mía, cuánto he aprendido!, pero ha sido muy divertido poder trabajar tanto en la administración como en el contacto con todos los huéspedes.

Tiempo libre: A menudo cogemos la autocaravana y viajamos, nuestro favorito es Tarifa, del que nunca nos «cansamos». Maravillosamente agradable cuando los niños, los nietos y la familia vienen aquí y disfrutan de España y del sol con y en nuestra casa.
Disfrutamos de cenas y juegos con amigos o disfrutamos del sol y de las maravillosas vistas del mar, las montañas y las zonas verdes.

Dos cosas que no sabían de mí:
Nade el Vansbro simmet después de que mi hermano me dijera: Si puedes nadar 1500 m, puedes nadar 3000 m. Fui a la piscina, nadé 1500 m una vez en noviembre (fue la única vez que nadé antes de Vansbro). En julio subimos y conseguí nadar toda la «carrera». Mi hermano tenía razón.
Me rompí el brazo cuando tenía unos 3 años: estaba sentada en el inodoro esperando a que mi tía cambiara el pañal a mi primo, me dormí, me caí… y me desperté con el brazo roto.